Las suculentas son plantas increíbles que cada vez ganan más espacio en la decoración de interiores y exteriores. ¡Y nada menos! Con sus hojas carnosas y sus variados colores y formas, pueden transformar cualquier ambiente en un espacio encantador y acogedor.

Además de hermosas, las suculentas son muy fáciles de cuidar. Como tienen la capacidad de almacenar agua en sus células, no necesitan riego constante y pueden sobrevivir en ambientes con poca luz. Basta con elegir un lugar con buena ventilación e iluminación indirecta y regarlas únicamente cuando el sustrato esté seco.
Sigue nuestra guía paso a paso al final de este post para aprender a plantar tanto en tierra como en cristalería sin drenaje.

Otra ventaja de las suculentas es que se pueden cultivar en variedad de recipientes, desde los tradicionales jarrones hasta tazas, botellas y otros objetos que tengas en casa que puedan acomodar el sustrato. Esto los convierte en una opción versátil y creativa para quienes les gusta ensuciarse las manos y crear sus propios arreglos.

Y si crees que las suculentas son todas iguales ¡estás muy equivocado! Existen varias especies y variedades, con diferentes colores y formas, que se pueden combinar para crear arreglos únicos y personalizados. Algunas de las más populares son las suculentas mariquita, las suculentas de jade y las suculentas bola de nieve.

Y luego, estaba emocionado de aprender a cultivar suculentas?

Con nuestra guía paso a paso aprenderás a cultivar suculentas tanto en tierra, en macetas, jarrones o cualquier otro utensilio que quieras, que tengan drenaje, como en vidrio, sin drenaje.

Primero aprendamos cómo cultivarnos en utensilios que tienen drenaje, es decir, pequeños agujeros para que el agua salga y no se acumule en el fondo:

1.Elija un recipiente adecuado: las suculentas pueden crecer en casi cualquier lugar que pueda contener tierra y permitir que el agua drene. Asegúrese de que el recipiente tenga orificios de drenaje en el fondo para evitar la acumulación de agua, que puede pudrir las raíces de las suculentas.
2.Prepare el suelo: las suculentas prefieren suelos sueltos y bien drenados. Puedes mezclar partes iguales de arena, perlita y turba para crear un sustrato, o puedes comprar un sustrato para suculentas en una tienda de jardinería.
3.Elige tus suculentas: Hay muchos tipos de suculentas disponibles, cada una con su propia apariencia y características.
4.Planta tus suculentas: Coloca un poco de sustrato para suculentas en el fondo del recipiente elegido. Saca la suculenta de la maceta y suelta las raíces. Coloque la suculenta en la tierra y llénela alrededor con más sustrato, presionándola suavemente para reafirmarla. Asegúrese de que la suculenta esté nivelada y no enterrada demasiado profundamente.
5. Riega tus suculentas: Las suculentas son plantas resistentes a la sequía, por lo que es importante no regarlas en exceso.

Regar sólo cuando la tierra esté completamente seca y mojarla bien, pero dejar correr el agua por los agujeros de drenaje y evitar dejar agua estancada en el fondo del recipiente.

Ahora aprendamos a cultivar nuestras suculentas en macetas y utensilios de cristal que no tienen forma de escurrir, corriendo el riesgo de que se acumulen en el fondo y se pudran las raíces.
Con los cuidados adecuados crearás un arreglo perfecto y tus plantas quedarán muy sanas y hermosas, mira como:
1- Llena 1/3 del recipiente con piedras como perlita y humedécelas un poco.
2- Luego agrega una capa de musgo. El musgo es opcional.
3- Cubrir el musgo con una capa de arena.
4- Agrega el sustrato específico para suculentas con una cuchara pequeña y luego posiciona la planta; aprieta un poco para que quede firme y agrega un poco más de sustrato a su alrededor, hasta alcanzar la altura ideal de tu maceta o jarrón.
Elija un sustrato que mezcle diferentes ingredientes activos, como tierra vegetal, arena, humus de lombriz, acondicionadores de suelo y fuentes de nutrientes como estiércol, piedra caliza y superfosfato.
5- Por último, cubrir el sustrato con otra capa de guijarros para decorar, o lijar. Y luego regar para que todo se asiente.
5- Las suculentas plantadas en cristal les gusta la luz indirecta, pero sin exponerlas directamente al sol.
6- Mucho cuidado con la cantidad de agua: los riegos deben ser escasos, ya que, al no haber agujeros para drenar el agua, tiende a acumularse en el fondo y puede pudrir las raíces. Riegue solo cuando el suelo esté completamente seco.